VATICANO. BENEDICTO XVI. No es sólo para Navidad

El sombrero del Papa se llama "camauro"

Ayer el Papa sorprendió de nuevo a los peregrinos. Durante la audiencia endosó el “camauro”, prenda invernal del vestuario pontificio, un gorro de terciopelo rojo con el borde de armiño blanco que ningún Papa había utilizado desde Juan XXIII.

Los Papas Pablo VI y Juan Pablo II la evitaron porque no celebraban al abierto las audiencias a los peregrinos, sino en el Aula Nervi, actual Aula Pablo VI. Pero la afluencia de peregrinos hace que sea imposible celebrarlas allí. Ande yo caliente, y ríase la gente.

“El Papa polaco era muy caluroso y evitaba prendas complicadas” explica Gammarelli, el sastre oficial de la Casa Pontificia. La ventaja de esta prenda frente al tradicional birrete blanco es que abriga también las orejas.

Benedicto XVI llevó una prenda similar el pasado 8 de diciembre cuando se desplazó en coche descubierto desde su residencia a la Plaza de España para participar en un homenaje a la Inmaculada Concepción.

A pesar de pertenecer al vestuario propio de los Papas, Gammarelli cuenta que ya Juan XXIII sorprendió al mundo cuando decidió utilizarla.

“Un día, el secretario de Juan XXIII llamó a la sastrería para pedir un camauro”, explicaba Gammarelli. “Aquí nadie sabía qué era por lo que el sastre se documentó y buscó cuadros de época hasta descubrir lo que era”.

De hecho, a Juan XXIII le gustaba tanto que incluso se hizo retratar con él para alguna de sus fotografías oficiales. Ya antes de Juan XXIII, Leon XIII lo usó varias veces.

El tiempo dirá si Benedicto XVI está satisfecho y desea repetir, o preferirá guardarlo en el baúl de los recuerdos.

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